viernes, 29 de abril de 2011

Todopoderosa

THOR

Título original: Thor
Año:
2011

País: EE.UU.
Duración: 120 min.
Fecha de estreno en España: 29 de abril de 2011
Director: Kenneth Branagh
Guión: Ashley Miller, Zack Stenz y Don Payne, según el personaje creado por Stan Lee, Jack Kirby y Larry Lieber
Música: Patrick Doyle
Montaje: Paul Rubell
Fotografía: Haris Zambarloukos
Compañía: Marvel Entertainment/Paramount Pictures
Productor: Kevin Feige
Intérpretes: Chris Hemsworth, Natalie Portman, Stellan Skaarsgard, Anthony Hopkins, Tom Hiddleston, Idris Elva et al.

Odín, el rey de Asgard y padre de todos los dioses, tiene dos hijos varones: el primogénito y arrogante Thor y Loki, el hermano pequeño que se siente eclipsado. En el día del nombramiento de Thor como rey de Asgard, unos gigantes del hielo, seres de otros mundos que habitan el universo, entran en el palacio de Odín e intentan robar un valioso objeto. A pesar de que Odín y el resto de dioses logran abatirlos antes de que consigan su objetivo, Thor sugiere atacar el mundo de los gigantes de hielo como respuesta, pero su padre decide tomárselo con más calma. Sin hacerle caso, Thor y sus amigos deciden actuar por su cuenta, atacando a los gigantes de hielo. Tras salir ilesos de una muerte segura, Odín recrimina a Thor su actitud arrogante y por desobedecer las órdenes de su padre decide desposeerle de sus poderes y exiliarle a Mithgard, el mundo que se conoce popularmente como la Tierra. Allí el dios del trueno deberá regresar a casa como sea, pero en su empeño conoce a Jane Foster, una científica que le causará una gran impresión.

Hace poco me aficioné a una serie llamada "Los Vengadores, los héroes más poderosos de la Tierra". Es una serie de animación muy buena sobre el grupo de superhéroes de moda. Había algunos que más o menos conocía, más que nada por las películas, como Hulk o Ironman, pero otros como Thor no los conocía a fondo y lo descubrí en esta serie. Acabó gustándome, pero deduje que representar en la gran pantalla, a un público general, la historia de un dios que visita la Tierra y no quedar ridículo podría suponer una tarea muy difícil. Y a medida que veía imágenes de la película, el traje de Thor o incluso el trailer me iba defraudando más, tanto el estilo de la película como el interés de la trama. Se podía decir que, viendo lo que había, esta podía ser la peor de todas las películas Marvel. Pero no contaba con la sabiduría de los chicos de Marvel.

La cuestión es que la película requería de dos objetivos: contar una historia mitológica basada en leyendas nórdicas y al mismo tiempo lograr que esto encajara en una película que fuera un blockbuster. Para lo primero contrataron a Kenneth Branagh, un reputado director y actor shakespeariano que parecía no casar en el tipo de película supertaquillera que debía ser "Thor". Sin embargo, el británico aporta a la película la experiencia necesaria para representar el mundo de Thor sin que chirríe. Y lo logra gracias en parte, a un reparto espectacular que parece estar encantado de conocerle. todos son fantásticos, desde Chris Hemsworth, capaz de representar furia, odio, tristeza y humor en un mismo personaje, a la siempre impresionante en todos los sentidos Natalie Portman. Sin embargo, y aquí he de quitarme el sombrero (o el yelmo más bien) ante Tom Hiddelston. Su Loki es uno de los mejores villanos de la entera historia de los superhéroes Marvel. Y es que, aunque el propio personaje puede ser algo típico (el hermano segundon que vive a la sombra del hijo predilecto de papá), la elegancia y carisma que le pone Hidddelston lo hace absolutamente irresistible. Vamos, que aunque se le vean las intenciones y sea un hijoputa, le seguiría hasta el fin de los tiempos. Si no es lo mejor de la película, es de lo mejor.

Y ya, con la parte difícil conseguida (hacer creíbles los personajes), tocaba lo imposible, representar el mundo de Asgard sin que parezca un chiste malo. Aunque, a decir verdad, para los muchachos de ILM no hay nada imposible. En serio, a estos tipos hay que ponerles un monumento. Las escenas de acción con monstruos y demás podría considerarse del montón, pero el tema de los viajes entre los mundos hace que yo, un muchacho que está en contra del 3D, os amine a que las veáis en este formato. No he visto algo más espectacular en mucho tiempo. Eso sí, los barridos y los movimientos rápidos siguen pareciendo borrosos. esperemos que Peter Jackson lo solucione en "El hobbit" con su nuevo invento.

Así, mientras Branagh se encarga de dar el ritmo adecuado y de hacer entretenida durante dos horas una historia que parecía no tener miga, los chicos del departamento artístico hacen de las suyas: las recreaciones de Asgard son impresonantes y cómo Branagh "esconde" la ciudad en el universo infinito (con múltiples recovecos y planos que parecen del revés) ayudan a dar ese toque mágico y esplendoroso del mundo de los dioses. La banda sonora, absolutamnete maravillosa, inunda la pantalla, ayudando también a incrementar la épica de la película. Se puede decir sin duda que en el apartado artístico la película es impecable. Y para más inri, a muchos de los gigantes de hielo están maquillados, no creados por ordenador, lo que para un servidor, nostálgico de los efectos artesanales del cine ochentero, es un detalle maravilloso.

Pues al final, la que parecía que iba a ser la peli menos buena de toda esta parafernalia de Los Vengadores resulta ser posiblemente, la mejor de las que ha y hasta el momento, por la dificultad de realizarla y lo bien que lo han hecho. Y no sólo eso, sino que han logrado que la película tenga de todo: humor del buelo, chistes estúpidos, acción de la buena, romance, aventuras, caméos de Stan Lee (no diré cuando aparece), apariciones de un nuevo vengador (los conocedores del grupo de superhéroes sabrán de quién se trata), la mejor escena postcréditos de todas las pelis de superhéroes Marvel, 3D espectacular y montones de formas diferentes de llamar al martillo de Thor, por lo menos en la versión doblada (lo llegan a llamar minué, para mi propio estupor), en una película de esas en las que no sólo te entretienes, sino que te diviertes y disfrutas como si fueran un maldito adolescente. Eso sí, hay un par de cosas que no me han gustado: el prólogo, aunque espectacular, tiene tantas similitudes al prólogo de "La comunidad del anillo" que han decidido evitar comparaciones insertando antes una escena que, aunque interesante y muy espectacular, rompe el ritmo de la narración y queda como un injerto aislado mal puesto para curarse en salud. El otro defecto, al menos para mí, es mucho más grave: que aún quedan dos años para ver "Los Vengadores". Ay, quien pudiera viajar al futuro...

sábado, 23 de abril de 2011

Nausicaä revisited

LA PRINCESA MONONOKE


Título original: Mononoke hime
Año: 1997
País: Japón
Duración: 133 min.
Fecha de estreno en España: 7 de abril de 2000
Director: Hayao Miyazaki
Guión: Hayao Miyazaki
Música: Joe Hisaishi
Montaje: Hayao Miyazaki y Takeshi Seyama
Fotografía: Atutsi Okui
Productor: Toshio Suzuki
Compañía: Studio Ghibli
Intérpretes: (Voces V.O.) Yôji Matsuda, Yuriko Ishida, Yûko Tanaka, Kaoru Kobayashi, Masahiko Nishimura, Tsunehiko Kamijô, Sumi Shimamoto et al.

Ashitaka es el príncipe de un legendario pueblo medieval de Japón. Un día su pueblo sufre el ataque de dios, con forma de jabalí, que por alguna extraña razón se había convertido en un demonio maligno. A pesar de que acaba derrotándole, Ashitaca es herido grabemente en su brazo derecho y la infección acabará propagándose por su cuerpo hasta morir. Es por ello por lo que el príncipe decide huir, abandonar su ciudad y aprovechar sus últimos días en descubrir por qué ese dios les atacó. Las pistas le llevan a un misterioso poblado minero, cuyo progreso ha consistido en la extracción de un metal muy resistente y la fábrica de fusiles. Su líder, Lady Ebosi, utiliza esas armas para luchar contra los dioses del bosque, pues éste una gran fuente de mineral, pero los dioses lo protegen. Así, Ashitaca se encuentra con un conflicto que puede desencadenar la guerra entre los humanos y los dioses del bosque, cuya figura primordial es Mononoke, una princesa humana adoptada por los lobos, que tiene la llave para lidiar con los dos mundos y evitar que corra la sangre.



No he muerto. Simplemente se acerca junio y este cuatrimestre es bastante intenso, con lo que a penas he tenido tiempo ni para ver ni para escribir. Aunque, a decir verdad, esta demora ha sido, en parte, porque esta crítica quería publicarla en un día señalado, aunque con un poco de retraso, eso sí. Ayer, día 22 de abril, fue el día mundial de la Tierra, ¿y qué mejor para celebrarlo que hablar de una película que trata el tema de la convivencia entre el ser humano y la naturaleza como "La princesa Mononoke?

Hace años, en otro blog ya extinto, publiqué una entrada con la crítica de "Nausicaä del valle del viento" para rememorar este día. Digo esto porque, si hay algo claro cuando uno ha visto "La princesa Mononoke", es que ambas son iguales: mismo argumento, misma estructura, todo igual. Eso sí, los años han hecho que la séptima película de Miyazaki goce de una mejor animación, una mayor complejidad y, por supuesto, una mayor calidad que la de 1984. Se puede decir, por tanto, que "La princesa Mononoke" es una versión mejorada de Nausicaä, como si el director no estuviera a gusto con la primera y pensara que había que retocarla. Y al final creó una película que, si no es una obra maestra (a mí no me terminó de convencer del todo, ya lo explicaré), es lo más parecido a una película perfecta.

Miyazaki necesitó 3 años para realizar esa maravilla titulada "Porco Rosso", pero el tiempo de preparación de esta colosal obra requirió de dos años más (5 en total), lo que indica su grado de complejidad y su magnitud. Y es que puede ser que estemos hablando de una de las películas más complejas del director, y también de las más atrevidas. Si en la anterior crítica comentaba que "Porco Rosso" era la más occidental de su películas, se podría decir que esta es de las más orientales, no sólo por la mitología fantástica, sino por la propia estética, que me hizo recordar muchísimo a las películas de samurais del genio Akira Kurosawa.

Sin embargo, aunque Miyazaki vuelve a su género favorito, no deja de sorprender, pues introduce algunas connotaciones en "la princesa Mononoke" que no sólo la hacen diferente a cualquier otra que haya hecho, sino que demuestran su madurez creativa. Una de ellas es la violencia. A lo largo de su filmografía se han visto escenas de acción, incluso peleas a puñetazos, pero el director nipón emplea en esta películauna violencia extrema, sangrienta. No haber visto ni pizca de sangre en sus películas y ver como Ashitaca le corta los brazos a uno de un flechazo, es sumamente impactante. ¿Por qué Miyazaki viene ahora con algo así? La respuesta la encuentra uno si se fija bien: esa ultraviolencia no ocurre porque sí, sino que está relacionada con el mal, con el odio y con la rabia de los seres humanos. Me explico: las escenas en las que Ashitaka rebana brazos y cabezas limpiamente con su arco se debe a que dispara las flechas con su brazo herido, el brazo afectado por el ataque del demonio maligno causado por los seres humanos. Es decir, hay un significado en esa violencia y esa carnicería. En el resto de batallas, siempre que los humanos están involucrados en la pelea, aparece la sangre de una forma u otra.

Otro de los factores de esta película es su complejidad, sobre todo en la psicología de los personajes. Ya en Nausicaa teníamos a un personaje que se debatía entre la naturaleza y la humanidad, entre un bando y otro, y no sabía con cual quedarse. Pero el dilema moral quedaba ahí. En el fondo, lo que podía hacer que Nausicaa apoyara a los seres humanos era que eran de su misma especie, pero los actos del pueblo que quiere atacar no tienen nada de positivo. Se podrían decir que eran malos muy malos. En "La princesa Mononoke" eso no ocurre. También tenemos un pueblo gobernado por una mujer que quiere destruir el bosque, pero vemos en ella cierta humanidad, y cierta bondad: ha sacado a las mujeres de los burdeles y las ha dado un trabajo, ha repartido las tareas entre hombres y mujeres de forma más o menos equilibrada y ha creado una ciudad próspera. Se podría decir que Lady Ebosi es una mujer que merece nuestro respeto. Sin embargo, quiere destruir el bosque, y al dios supremo que allí habita. Lo mismo pasa con los guardianes del bosque. Van a ser atacados y se comprende su actitud, pero hay quien discuta su forma de actuar o no. Es decir, que tenemos personajes completamente bipolares, más reales y más complejos que la antigua Nausicaa, lo que implica una reflexión más profunda sobre la forma de actuar de los humanos.

No obstante, es este punto el que, al menos para mí, hace que la película no acabe del todo bien para mi gusto, y ojo aquí que voy a soltar espoilerazos a mansalva. Para mi gusto, que una mente tan obsesiva como la de Lady Ebosi siga en su empeño de matar al dios del bosque, aunque media ciudad esté en peligro y sin importarle el precio, cambie de repente de mentalidad y todo sea maravilloso, me parece demasiado forzado. Comprendo que Miyazaki quiere dar un mensaje de esperanza, que cree en la convivencia de hombre y naturaleza y confía en la redención del ser humano, pero tal y como lo cuenta con el personaje de Lady Ebosi, me parece demasiado forzado y muy poco creíble. Ha observado sucesos sobrenaturales que le haría recapacitar incluso al más incrédulo y ella seguía empecinada en su objetivo. Y aun perdiendo medio cuerpo sigue en su empeño ¿Por qué cambia de parecer tan de sopetón? Probablemente no lo haya entendido bien o no haya visto bien el final, pero es mi opinión, y lo que lastra, a mi parecer, la conclusión de una película perfecta.

Así que se podría decir, a grandes rasgos, que "La princesa Mononoke" es una versión mejorada y de infinitamente mayor calidad que la película en la que está basada, "Nausicaä dle valle del viento", y que demuestra la madurez del director que ya inició con "Porco Rosso". Película grandiosa, preciosa, llena de acción y épica, con una música impresionante y un mensaje importantísimo, el edulcorado final hace que, en mi opinión, no termine de ser todo lo grande que podía haber sido. De todas formas, una auténtica joya de la animación, uno de los mejores trabajos de Miyazaki y una de las mejores películas de animación de todos los tiempos. Parecía imposible que fuera a ser superada, pero años después el director japonés nos iba a sorprender con el mayor espectáculo de animación que jamás ha podido vislumbrar la humanidad. Pero sobre ello se hablará en la próxima entrada.


PD: Han hecho una cosa horrorosa en la versión española del DVD: han doblado el precioso tema "Utada hikaru" y era algo insufrible. Comprendo que quieran doblar las canciones para que las entiendan los niños, pero es que esta peli no la van a ver los niños, o al menos no deberían verla.