lunes, 21 de diciembre de 2009

1957: Silbando al trabajar

EL PUENTE SOBRE EL RÍO KWAI

Título original: The bridge on the river Kwai
Año: 1957
País: Gran Bretaña
Duración: 155 min.
Fecha de estreno en España: 13 de octubre de 1958
Director: David Lean
Guión: Michael Wilson y Carl Foreman, según la novela homónima de Pierre Boulle
Música: Malcolm Arnold
Montaje: Peter Taylor
Fotografía: Jack Hildyard
Productor/es: Sam Spiegel
Compañía: Columbia Pictures
Intérpretes:

Ganadora de 7 Oscar: película, director, guión adaptado, actor, música, montaje, fotografía

El coronel Saito rige un campo de prisioneros de una selva de Tailandia durante la Segunda Guerra Mundial. Sus duros métodos y el insoportable clima de la zona han hecho que casi todos los presos que allí vivían muriesen, con lo que el coronel no puede llevar a cabo la orden de construir un puente sobre el cercano río Kwai que conecte varias divisiones del ejército japonés. Afortunadamente, acaba de llegar al campamento todo un batallón de soldados británicos, liderados por el coronel Nicholson, para solucionar el problema. Pero Saito pronto descubrirá que sus maneras rudas y violentas contrastan sobremanera con la calma y nobleza del coronel británico, originándose entre ellos un conflicto que pondrá en dificultades la ejecución del proyecto.

Como comenté en una de las críticas anteriores, el género bélico es el que mayores obras maestras ha generado y con "El puente sobre el río Kwai" no iba a ser menos. No sólo es una obra maestra, sino que es una de esas películas que pertenecen a la cultura popular.

David Lean, director de una de las mejores películas de todos los tiempos, la indescriptible "Lawrence de Arabia", es famoso por la espectacularidad de sus rodajes. Sin embargo, en "El puente sobre el río Kwai", esa espectacularidad parece que queda en un segundo plano, pues el director se centra más en mostrar la forma de actuar de los distintos implicados en el asunto.

Y es esto lo más interesante de todo el filme, pues cada personaje representa una forma de gobierno, siempre relacionada con su cultura y su forma de ser. Por ejemplo, el coronel Saito representa la tiranía y el autoritarismo y Nicholson la democracia, muy acorde con su talante británico. Esa lucha entre el oficial japonés y el británico no es otra cosa que la lucha entre la democracia y la tiranía, y el triunfo de Nicholson es un ejemplo del poder que tiene esta primera forma de gobierno. Pero luego está Shears, el "oficial" americano, y el pequeño comando que quiere derribar el puente (o la democracia). Sería el imperialismo, representado, cómo no, por los americanos. Y por último está el mayor Clipton, el médico, el único que no entiende las normas de la guerra (o quizá las normas que le imponen los poderosos). Representa al pueblo, aquel que muchas veces no comprende la decisión de los mandatarios, sean del partido que sean o pertenezcan a la forma del gobierno a la que pertenezcan. La secuencia final, en la que le vemos contemplando horrorizado la masacre, es el que afirma que todo aquello es una locura, dejando clara la postura de Lean al respecto: el desmadre que pueden producir los poderosos, que se enzarzan en batallas sólo por su propio provecho y acaban en una locura. Quizá sea este mensaje tan universal lo que haya hecho que "El puente sobre el río Kwai" haya envejecido tan bien a lo largo de los años.

Pero como he comentado antes, Lean es un director de superproducciones y esta, aunque más modesta, también tiene algunas partes que demuestran su grandeza. Desde el espectacular inicio en el que las tropas entran en el campamento silbando esa mítica melodía, hasta la secuencia en la que finalmente Nicholson es liberado, culminando, claro está, en su apoteósico desenlace, como si se tratase de una traca de fuegos artificiales, donde lo más sonoro y más intenso se deja para el final. La demolición del puente justo al paso del tren puede ser una de las secuencias más espectaculares de la historia del cine. Para su realización se construyó un auténtico puente y el tren era auténtico. Ni maquetas ni nada ¡Esto es Hollywood! No quiero ni imaginarme lo bien que se lo debieron pasar al rodar esa escena.

Por eso, el plano final, en el que vemos toda la destrucción, tanto material como humana, que ha generado todo esto, en un fenomenal plano general que se va abriendo y alejando, nos permite resumir lo que es "El puente sobre el río Kwai": un drama sobre los gobiernos del mundo, que se enzarzan en batallas con fatales desenlaces sin importarle el pueblo para nada. Una historia con importante carga social donde la voladura del puente aporta el toque de espectacularidad de las producciones de Lean. Magníficas interpretaciones, sobre todo del gran Sir Alec Guinness; una fotografía descomunal, un montaje intensísimo, una música inolvidable... En definitiva, una película que tiene absolutamente de todo y que, a pesar de su larga duración, no se hace larga en absoluto. Una obra maestra.

2 comentarios:

emera86 dijo...

Todo el mundo conoce la famosa melodía del silbido... pero en mi caso no fue hasta más tarde que me enteré de que era de esta peli... jajajaja...

Chuparrocas dijo...

A mí me pasó lo mismo con lo de "Avogadooooooo...", que no supe que era de "El cabo del miedo" hasta el momento en que la vi. La cosa tiene delito, porque la peli era de Scorsese...