jueves, 21 de enero de 2010

1980: Son como personas normales

GENTE CORRIENTE

Título original: Ordinary people
Año: 1980
País: EE.UU.
Duración: 119 min.
Fecha de estreno en España: 18 de marzo de 1981
Director: Robert Redford
Guión: Alvin Sargent, según la novela homónima de Judith Guest
Música: Marvin Hamlisch
Montaje: Jeff Kanew
Fotografía: John Bailey
Productor: Ronald S. Schwary
Compañía: Paramount Pictures/Wildwood Enterprises
Intérpretes: Donald Sutherland, Mary Tyler Moore, Judd Hirsch, Timothy Hutton, M. Emmet Walsh, Elizabeth Mcgovern, Dinah Manoff, James B. Sikking et al.

Ganadora de 4 Oscar: película, director, guión adaptado, actor secundario

Conrad es el menor de los hijos de Calvin y Beth Jarrett, un matrimonio de clase alta de un adinerado barrio de EE.UU. El chico acaba de volver a casa tras pasar unos cuantos meses en el hospital por un intento de suicidio. Y todo surgió a raíz del accidente que causó la muerte de Buck, el hijo mayor, suceso del que Conrad se siente culpable. Para mejorar su tratamiento, Conrad deberá acudir a un psiquiatra para encontrar un remedio a su depresión, pero pronto descubrirá que no es tan fácil, pues no sólo se siente más distanciado de sus antiguos amigos, sino que ve cómo resulta un problema para la imagen social de la familia.

En 1980 se estrenó el que es uno de los mejores trabajos de Martin Scorsese: "Toro salvaje", la impresionante biografía de Jake la Motta, el toro del Bronx, considerada como una de las mejores películas de la historia. Debo confesar que, tanto por devoción a Scorsese como por experiencia al ver la cinta, consideré una injusticia enorme que esta grandísima película no ganara el más importante Oscar. Pero esto pensé hasta que vi "Gente corriente", el debut en la dirección de Robert Redford, que sin tener la fuerza narrativa y la calidad técnica de la de Scorsese, las sensaciones que produce y la intensidad del filme la convierten en una digna rival.

Como resumen inicial, se podría decir que "Gente corriente" es una mezcla entre "Donnie Darko" y "American Beauty". Se asemeja al primer título en que el protagonista es un adolescente con problemas mentales, que es considerado raro por sus colegas y que encuentra el amor y el consuelo en una joven compañera de clase. En la segunda se asemeja, aunque en menor medida, en la crítica a la sociedad americana, que no soporta el fracaso en un mundo perfecto. Esto se expresa en el film en la parte de la fiesta a la que acuden los Jarrett, en la que Beth critica a su marido por decir a una amiga que asistió al convite que su hijo va al psiquiatra, por considerarlo un signo de vulnerabilidad.

Sin embargo, a parte de que esta película es muy anterior a las dos citadas, no llega a tener la psicodelia de "Donnie Darko" ni el sarcasmo y acidez de "American Beauty", así que la comparación es más temática que otra cosa. Redford no se centra en artificios ni en llamativos efectos de cámara, sino que se centra en la psicología de los personajes, retratando con gran eficacia la dureza de la existencia del pobre Conrad. Es este el mejor personaje de toda la película, interpretado de forma insuperable por un jovencísimo Timothy Hutton. Es curioso que, aun siendo el protagonista, ganara el Óscar al mejor actor secundario. Y es que ese año, el Oscar al mejor actor principal iba a ser (tenía que ser, por obligación), para Robert De Niro, por su brutal recreación de La Motta en anteriormente citada "Toro salvaje". De esta guisa se las ingeniaron los de la Academia de Hollywood para premiar a los dos mejores actores del año.

Pero no sólo está el personaje de Conrad, sino que el resto de actores y sus papeles están igual de bien. Tanto el potente papel de Mary Tyler Moore como la despreciable madre de Conrad, hasta el sobrio pero no por ello peor interpretado padre del chico, hecho realidad por un contenido pero impresionante Donald Sutherland. Incluso el psicólogo o Karen, la amiga de Conrad, mi personaje favorito, por lo hemroso que es y por lo que significa en la película, todos están fabulosos a la hora de expresar el tremendo drama que supone la película.

En los demás aspectos, como el guión, fotografía, música y demás, poco que comentar. El guión es sensacional, algo normal viniendo de una novela, y la música es lo más llamativo, pues a pesar de haber más temas compuestos, el tema que predomina en el filme, y que queda en la memoria del espectador, es el famoso canon de Pachelbel, tocado de una forma tan lenta que ayuda a recrear el ambiente de melancolía que inunda el filme. Con este tema se inicia y se finaliza la película, un tema hermoso pero triste al mismo tiempo.

Así que se puede decir que "Gente corriente", a pesar de no alcanzar la calidad de "Toro salvaje", es un peliculón y una digna trinfadora de los primeros Oscar de los años 80. Eso sí, a pesar de la fuerza, intensidad y dureza de la cinta, la peli de Scorsese es inmensamente superior y tenía que haber logrado el triunfo. Pero no entendamos mal, "Gente corriente" no es una mala película, sólo que "Toro salvaje" es una obra maestra insuperable. La segunda en la frente para el director de Queens.

2 comentarios:

Ignacio dijo...

He de decir en mi debe que no la he visto.

Pero dudo que sea mejor que Toro Salvaje.

Le echaré un ojete.

Chuparrocas dijo...

En absoluto, no es mejor mejor que "Toro salvaje", pero no deja de ser un peliculón.