martes, 28 de octubre de 2008

Todos tenemos un lado oscuro

LA FAMILIA STUPID

Título original: The Stupids
Año: 1996
País: EE.UU.
Duración: 90 min.
Fecha de estreno en España: 8 de agosto de 1996
Director: John Landis
Guión: Brent Forrester, según los personajes de James Marshall y Harry Allard
Música: Christopher Stone
Reparto: Tom Arnold, Jessica Lundy, Bug Hall, Alex McKeena, Mat Keeslar, Scott Craft, Christopher Lee, Costantin Costa-Gavras, Robert Wise, David Cronenberg et al.
Compañía: New Line Cinema

Venga, reconocedlo. Todos tenemos un lado oscuro. Todos tenemos en nuestro corazoncito de melón una película de dudosa calidad pero que por cualquier razón nos ha marcado de por vida. Yo haré un esfuerzo y os confesaré que esta, "La Familia Stupid", es una de las películas que más guardo con cariño. A simple vista puede parecer una chorrada pero cuando uno es joven no piensa en la calidad del filme sino en los buenos ratos que ha pasado viéndola. Incluso cuando uno es mayor la revisa y no ve nada malo en ella, quizá nublado por los buenos recuerdos.

No sé si os sonará esta película, típica de canales como Localia u Onda 6. Recuerdo el día en que la cogí en aquel videoclub donde había un caballito mecánico en la entrada, vendían patatas fritas y muñecos gigantes de Hulk Hogan. Ahora que soy mayor y cuando la recuerdo pienso cómo me pudo gustar esta película. La respuesta creo que está en su conjunto de chorradas acumuladas.

Atentos al argumento. La película narra la historia de los Stupid, una familia que hace honor a su apellido. El padre Stanley trabaja de cartero y está obsesionado con que alguien quiere apoderarse del correo de la gente, pues siempre le devuelven las cartas con un sello donde pone "devolver a remitente". ¿Quién será ese tal Remitente? A esa duda existencial se le suma otra más preocupante: le roban la basura. Resulta que él siempre la deja en el cubo de metal que tiene en el jardín y al día siguiente ya no está. ¿Quién se la habrá robado? ¿estará el señor Remitente detrás de todo esto? Harto de no encontrar explicación una noche decide investigar hasta que descubre la verdad: un gran camión con lucecitas roba su basura. Rápido y veloz persigue el misterioso camión, comenzando la mayor aventura que ha vivido la familia.

Como veis todo es una absoluta chorrada, pero tiene algo que no poseen muchas comedias: te ríes. Es un humor que podríamos comparar con el de Muchachada Nui, un humor surrealista que a veces te hace reír y otras simplemente, te deja patidifuso delante de la pantalla pensando "¿pero esto qué es?". Uno de estos momentos de estupor se produce en una escena que para mí es de las mejores de la historia. Una escena mítica e impactante por el surrealismo y por quién la protagoniza. Después de deducir Stanley Stupid que hay un tal Remitente que quiere dominar el mundo robando las cartas tu piensas: ¿será gilipollas? ¿cómo va a haber un tío que se llame remitente? Tras este pensamiento la escena cambia y nos quedamos boquiabiertos, pues ante nosotros aparece la guarida secreta del señor Remitente, un malvado hombre que roba las cartas de la gente. En ese momento la bofetada nos la llevamos nosotros, pues acabamos de comprender que un estúpido como Stan tenía más razón que nosotros. Pero el estupor no termina ahí, sino que continúa al ver quién interpreta al gran señor Remitente, y este no es otro que el mítico Christopher Lee. Sí, habéis leído bien. Christopher Lee aparece en este pequeño, surrealista e inconmensurable cameo haciendo del señor Remitente. Así el estupor es máximo y sólo te queda la opción de decir una frase: ¡¡Qué grande!!

Pero esta que acabo de mencionar no es la única escena mítica de la película. Si por algo es conocido "La familia Stupid" es por su escena del talk show, la mítica escena del "Yo mi abuelo soy", una escena que alcanza el súmum de la patochada y del surrealismo más surrealista y que guarda una historia detrás. No se si conoceréis la historia del hombre que alegó ser su propio abuelo para no ir a la guerra. La historia es tan famosa en EE.UU. que hicieron una canción, llamada "I'm my own grandpa" ("Yo mi abuelo soy" en español). Pues esta canción aparece en la película en una escena en la que el padre de los Stupid se cuela en el plató de un talk show en el que cada uno cuenta la historia más impresionante de todas: incestos, adulterios... hasta que le toca el turno a Stan y afirma ser su propio abuelo. Ahí comienza el verdadero momento mítico del filme. Os dejo el vídeo para que escuchéis la canción. Enorme. Os veo a todos con lápiz y papel intentando cuadrar lo que dice, pues aunque no lo parezca tiene sentido.

No hablo de aspectos técnicos porque a penas destacan. Las interpretaciones, el guión, el vestuario, todo cumple con creces para su función, que es entretener. Con todo, "La familia Stupid" es una peli de sábado por la tarde, pero asombrosamente divertida. Una película que se merece un visionado al menos en una tarde de aburrimiento absoluto sin nada que hacer. Un filme que tiene un humor que se podría comparar al de "Agárralo como puedas" o "Aterriza como puedas", comedias que, muy a mi pesar, son como la Coca Cola en botellas de cristal verde: ya no se fabrican.

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