sábado, 1 de noviembre de 2008

El último grito de la Disney

TARZÁN

Título original: Tarzan
Año: 1999
País: EE.UU.
Duración: 84 min.
Fecha de estreno en España: 26 de noviembre de 1999
Director: Chris Buck y Kevin Lima
Guión: Noni White, Bob Tzudiker y Tab Murphy, según la novela homónima de Edgar Rice Burrows.
Música: Marc Mancina y Phill Collins
Reparto: (Voces V.O.) Tony Goldwyn, Minny Driver, Glen Close, Brian Blessed, Nigel Hawthrone, Hans Henricksen et al.
Compañía: Walt Disney Pictures

La compañía Disney, de la cual soy un enamorado y fiel seguidor, vivió su segunda edad de oro allá por los lejanos años 90 (¡diantres, que viejo soy!). Con "La Sirenita", la primera película con la que un servidor fue al cine (y saqué a bailar a una niña, según cuenta la leyenda) aunque no recuerde nada de ello, la compañía nos obsequió un poco de entretenimiento, que si no fuera por su maravillosa canción "Bajo el mar" no sería lo mismo. "Aladdin" fue una genial película que contiene la que es, según mi punto de vista, la mejor canción jamás compuesta para una película de animación: "Un mundo ideal" (no confundir con "Un mundial", gran parodia de la misma canción). Un año antes nos ofrecieron una maravilla llamada "La Bella y la Bestia", hasta el momento la primera y única película de animación nominada a mejor película en los Oscars. Y finalmente en 1993 Disney realizó su obra cumbre, su mejor película sin discusión, "El Rey León", una de mis películas favoritas y la única de la factoría en la que no salía ningún humano (hasta que hicieron "Cars").

Pero como suele pasar en estos casos cuando se alcanza la cima no hay otra opción que bajar y la Disney empezó a decaer, ofreciéndonos trabajos poco más que interesantes, ("Hércules", "Mulán") y otras bastante buenas, que indicaban que aún podían ofrecer algo, que no todo era bajar ("El jorobado de Notre Dame"). Fue en este panorama, con un poco de energías renovadas con la adaptación de la novela de Hugo, cuando en 1999 Disney nos sorprendió a todos con su nueva y espectacular película, una mezcla de "El Libro de la selva" y "El Rey León", que evitó el naufragio de la compañía creada por el genial dibujante de Mojacar... digo... de Chicago: "Tarzán", una de las mejores películas de la factoría Disney y una de las mejores de la historia de la animación.

No sé si recordaréis hace algunos años, cuando Cuatro todavía era un canal balbuceante, que dicha cadena emitió una gala en la que se dio a conocer la que según los lectores de su web era la mejor película de Disney de la historia. La nº 1, lógicamente, era "El Rey león", pero la sorpresa estaba en que, tras ser "La Bella y la Bestia" la 3ª clasificada, el 2º puesto pasó a ser esta película que ahora comento. Pero qué tiene esta película para que se la considere una de las mejores de la compañía. Pues muchas cosas.

Para empezar está la archiconocida historia del niño criado entre simios, en las selvas de América, que encuentra un dilema de identidad cuando llega a la jungla una expedición para estudiar los gorilas y deberá decidirse entre quedarse con su simiesca familia o dejar la selva y viajar con los de su especie. Cuando se encuentra una buena historia hace falta poco más, pero en la Disney saben que pueden hacer mucho más y se emplearon a fondo en la imagen, en el impacto visual. Hicieron que su nueva película entrara por los ojos, como la comida, y lo consiguieron con creces, pues su hermosísima fotografía, sus espectaculares decorados y su gusto por el detalle son lo mejor que tiene "Tarzán". Esto, mezclado con unos movimientos de cámara, animación y movimientos del protagonista, totalmente simiescos, hicieron que la película alcanzara un ritmo frenético.

Pero si algo se han caracterizado las películas de Disney es por su genial banda sonora y por sus magníficas canciones. Si juntamos todo eso con una música realmente buena, que recrea a la perfección los sonidos de la jungla, y ponemos a interpretar las canciones a un gran mito de la música como es Phil Collins, tenemos el éxito asegurado. Esto último merece tratarlo a parte, pues el grandísimo trabajo del famoso cantante, interpretando los temas en todos los idiomas habidos y por haber (inglés, francés, italiano, español latino, castellano...) dio sus frutos y otorgó el toque de clase y exotismo que le faltaba al filme, además de la curiosidad de escuchar a Collins cantar en un perfecto castellano, con sus ces y sus eñes bien pronunciadas. Un ejemplo de todo esto, del magnífico trabajo de fotografía, animación, tanto tradicional como 3D, música y montaje, es esta genial escena en la que se muestra el crecimiento de Tarzán, el rey de los monos.

La película se convirtió en un éxito de crítica y público y ganó numerosos premios, entre ellos el Globo de Oro y el Oscar a la mejor canción ("You'll be in my heart"), aparte de dos Grammys (banda sonora y canción) y un Annie, el más importante premio del cine animación, a la mejor película. Supuso, en definitiva, un gran empujón para la factoría del ratón Mickey que le permitió estar en la cima una vez más...

Pero los tiempos dorados de la animación habían acabado y un conjunto de películas mediocres ("El emperador y sus locuras", "Zafarrancho en el rancho"), sumados a la fiebre del cine de animación 3D de la cual sufrimos desde hace casi 10 años, acabaron por hundir completamente a la Disney. Sólo la unión con Pixar podría salvarlos, y así fue. Ahora brillan en el olimpo del cine de animación, cogidos de la mano de la productora antaño perteneciente a Lucasfilms (¿aún dudáis de la aportación de George Lucas al cine?). Por todo esto, "Tarzán", esa genialidad que nos regalaron los de Disney a final de siglo, reluce por encima de todas como la estrella polar, la última gran película de animación de la factoría Disney. You'll be in my heart, allways.

PD: Os dejo la escena de introducción de la película que es absolutamente rompedora. Lo casi lloro al verla y todo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Anónimo dijo...

Lamento informarte que el autor de "Nuestra Señora de París", novela en la que se basa "El jorobado de Notre Dame", es Víctor Hugo y no Alejandro Dumas, como indicas en la entrada.