jueves, 10 de diciembre de 2009

1954: Chivato paga plato

LA LEY DEL SILENCIO

Título original: On the waterfront
Año: 1954
País: EE.UU.
Duración: 105 min.
Director: Elia Kazan
Guión: Budd Schulberg, según unos artículos periodísticos de Malcolm Johnson
Música: Leonard Bernstein
Montaje: Gene Milford
Fotografía: Boris Kaufman
Productor/es: Sam Spiegel
Compañía: Columbia Pictures
Intérpretes: Marlon Brando, Eva Marie Saint, Karl Malden, Lee J. Cobb, Rod Steiger, Pat Henning, Leif Erickson, James Westerfield et al.

Ganadora de 8 Oscar: película, director, guión, actor, actriz secundaria, fotografía, montaje, dirección artística

Johny Friendly es el líder de los sindicatos de estribadores del puerto de Nueva York, un hombre que se codea con la mafia y cuyos métodos tienen aterrorizados a todos los trabajadores del lugar. Una noche, uno de los trabajadores aparece muerto en mitad de la calle. Todos saben que Johny está detrás de su muerte, pero nadie se atreve a decir nada por miedo a perder su vida. Por eso, todas las miradas se centran en Terry Malloy, uno de los trabajadores más jóvenes y el último en ver con vida a su compañero asesinado. Terry, al igual que los otros, se niega rotundamente a delatar a los asesinos, pero todo cambia cuando conoce a Edie, la hermana del muerto, de la cual se enamora. En ese momento, Terry deberá debatirse entre delatar a los asesinos y complacer a su amada o callarse y permanecer con vida.

La década de 1950 fue muy dura para EE.UU. Se produjo lo que se conoce popularmente como "la caza de brujas", en la que el senador Macarthy se dedicó a perseguir a todas aquellas personas que profesasen el comunismo. Muchos fueron los acusados y otros muchos los delatores que traicionaron a sus compañeros. Entre ellos, el más famoso es Elia Kazan, director de origen griego, el cual, desde que delató a algunos de sus camaradas de Hollywood, no se le ha tratado demasiado bien. Por ese motivo, el director decidió dirigir una película sobre un hombre que se debatía entre chivarse de su situación precaria o no hacerlo. La película se entendió como un modo de excusarse sobre lo que hizo, un simple producto para autocomplacerse. El problema está en que "La ley del silencio" no es un simple folletín, sino una auténtica obra maestra.

"La ley del silencio" es un filme lleno de poesía y metáforas, narradas con enorme elegancia por Elia Zakan que, junto con la genial fotografía y la gran música, nos brinda secuencias inolvidables, como aquella en la que Terry confiesa a Edie lo que vio, la parte del final, o la comparación entre las palomas y los halcones. Lo mejor de todo es que la película va aumentando la intensidad y la oscuridad a medida que avanza el metraje, alcanzando casi al final un tono típico del mejor cine de gangsters.

Todo ello con la impresionante interpretación de Marlon Brando, uno de los más grandes actores de la historia. Pero está acompañado de tres grandes figuras de la interpretación como eran Lee J. Cobb, el miembro del jurado más difícil de convencer en "12 hombres sin piedad", la debutante Eva Marie Sant y Karl Maldem, que interpreta al general Montgomery en "Patton", una de las mejores películas de la historia de los Oscar. Los cuatro realizan unas interpretaciones soberbias, pero es Brando, con su presencia y su fama, el que se lleva la voz cantante.

No sé si la intención de Kazan era hacer una película que le autoexculpase, pero le salió una grandísima película, un clásico imperecedero, lleno de intensidad y belleza. Película totalmente recomendable. ¡Va a ser difícil hacer un top ten!

3 comentarios:

cronopio dijo...

me apetece volver a ver esta peli... recuerdo que me gustó mucho en su momento, aunque ya me he olvidado casi por completo.

otra muy grande de kazan es América
yeah

Anónimo dijo...

"Soberbia", si no te importa.

Y Terry no pretende confesar su condicion precaria, sino el asesinato del hermano de su novia a manos de sus jefes.

La critica esta bien, pero creo que es muy corta para el pepinazo de peli que es.

Chuparrocas dijo...

Vale, revela el asesinato de un amigo suyo, y vale, es muy corta, pero es que no hay mucho que decir más que todo en ella es perfecto.