sábado, 20 de marzo de 2010

Maldita bastarda

KRULL

Título orginial: Krull
Año: 1983
País: EE.UU.
Duración: 115 min.
Director: Peter Yates
Guión: Stanford Sherman
Música: James Horner
Montaje: Ray Lovejoy
Fotografía: Peter Suschitzky
Productor: Ron Silverman
Compañía: Columbia Pictures
Intérpretes: Ken Marshall, Freddie Jones, Lysette Anthony, Liam Neeson, John Welsh, Robbie Coltrane et al.

El planeta Krull ha sido invadido por un monstruo del espacio exterior conocido como La Bestia, cuyo poder, los seres humanos no han podido superar. Para poder derrotarle, los dos reinos de Krull deciden unirse y sellar esa unión con el matrimonio de los dos herederos al trono: el príncipe Colwyn y la princesa Lyssa. Sin embargo, esa misma noche, los ejércitos de La Bestia irrumpen en el palacio el día de la boda y secuestran a Lyssa, produciendo una masacre. Colwyn, que ha sobrevivido al ataque, deberá viajar a la Fortaleza Negra, guarida de La Bestia, para rescatar a su amada princesa.

Cuando oí hablar de esta película empezó a interesarme por su historia y porque aparecía Leam Neeson, un actor que me gusta bastante. Pero cuando me informé más sobre ella descubrí que "Krull" es considerada por muchos como la hermana bastarda de "Star Wars". Y razón no les falta, pues salen naves espaciales, hablan de mundos y galaxias y cuando las espadas entrechocan salen chispas de colores, como claro "homenaje" a los sables láser. Incluso al inicio de la película, la escena de la llegada de la nave de los malos a la atmósfera de Krull es idéntica a la escena inicial del episodio IV, con el destructor imperial inundando la pantalla. El efecto que produce en Krull es parecido, pero no impresiona tanto como en "Star Wars".

No obstante, después de verla, mi opinión sobre su semejanza con la película de Lucas no queda tan clara, pasando de ser una copia barata y mal hecha de Star Wars al primer intento serio (si a eso se le llama seriedad) de llevar al cine la obra magna de Tolkien, "El señor de los anillos". Y es que, a pesar de salir naves espaciales y que los malos disparen rayos láser desde su lanzas, "Krull" es una aventura de fantasía medieval, con sus caballos, sus arcos, sus espadas, sus caballeros, sus mercenarios y demás. La incursión de naves espaciales y láseres es más por el fenómeno aún vigente de "Star Wars" y su introducción en la película es un intento del guionista para captar espectadores.

Pero más allá de que se ambiente en el mundo medieval, su similitud con ESDLA es tal que incluso algunos edificios y lugares son calcados a los de la novela: al inicio aparece una ciudad en una elevación, exactamente igual a Edoras; hay un castillo blanco a pie de unas montañas que, aunque dista mucho de parecerse al de la película, está claro que se han basado en Minas Tirith. También aparece por ahí la guarida de Ella Laraña e incluso el puente de Khazad Dum, con los malos disparándoles desde lejos mientras lo cruzan. Tal es su similitud que creo que el propio Peter Jackson se basó en esta película para hacer algunos escenarios y personajes de su trilogía pues ¿acaso los secuaces de La Bestia no se parecen descaradamente a Sauron?

A pesar de esto, a pesar del intento de imitar a "Star Wars" y a "El señor de los anillos", no lo logran, pues a parte de estar mucho mejor dirigidas y ser mucho más emocionantes que "Krull", las dos sagas anteriores se asemejan en algo importante: tienen unos decorados impresionantes. Mientras que en las pelis de Jackson y Lucas las maquetas y decorados eran auténticas obras de arte, en "Krull" todo es de cartón piedra. Hay algunos planos en los que se nota tan descaradamente que son de poliexpán, que no duran ni dos segundos y no hay ningún movimiento de la cámara, para que no aparezca ningún técnico al fondo de la pantalla y se descubra que es una burda maqueta. Además, teniendo en cuenta la grandeza de los efectos visuales de "Star Wars", no es lógico que una película seis años más antigua tenga unos efectos visuales tan cutres.

Sin embargo, a pesar de que la película no sea una maravilla estética, aunque tiene unos bonitos paisajes, la historia no está mal. Tampoco es que sea una obra maestra de la literatura cinematográfica, pero sí es una peli de fantasía bastante interesante, con las aventuras típicas del género, con los personajes variopintos que se encuentran en el camino, con el malo malísimo, la dama, el héroe y demás parafernalia. Así que, para aquellos que les guste la fantasía, la película les va a gustar, pues cumple con todos las tópicos del género. No vengáis esperando "El señor de los anillos" o algo por el estilo, más bien algo parecido a "Willow" o "La historia interminable", pero sin el carisma de ambas películas. Una película curiosa, para pasar el rato cuando no tengas otra cosa que hacer.

lunes, 8 de marzo de 2010

Palmarés Oscars 2010: Adiós a Pandora

Al fin. Después de 82 años, después de 2 meses y, sobre todo, después de tres horas y media insufribles, esta edición se recordará como el día en que una mujer ganó el Oscar a la mejor directora. Fue Kathryn Bigelow por su película "En tierra hostil", sorprendentemente para muchos, la triunfadora de la noche. Doblando, con 6, en número de estatuillas a la todopoderosa "Avatar", consiguió el Oscar a la mejor película, así como el de guión, montaje, sonido y montaje de sonido. Estos dos últimos, arrebatados a la película de Cameron, el cual se quedó como un pasmarote al ver cómo se los arrebataban. ¿Soy el único en este planeta que sabía que se los iba a llevar "En tierra hostil"? Una película de acción se fundamenta en el montaje y el sonido, mientras que "Avatar", un filme meramente visual, se llevó los correspondientes a este apartado: fotografía, efectos visuales y dirección artística.

A parte de esto, nada interesante. Todos los premios coincidieron con los de los distintos gremios cinematográficos, variando sólo el premio de "Precious" al mejor guión adaptado. Esta película se saldó con dos premios (mejor actriz secundaria), así como "Up", que consiguió los premios a la mejor película de animación y mejor banda sonora. El Oscar a la mejor película de habla extranjera la ganó la argentina "El secreto de tus ojos", algo que irán pregonando la prensa como triunfo del cine español o algo así. Y es que ni Penélope Cruz ni Javer Recio García se llevaron su premio. Lástima.

Sobre la gala, no mucho que decir. Aburrida no lo fue tanto, pues cuando uno ve por primera vez estos premios siempre encuentra algo interesante. Pero larga fue un rato. Siempre seguían la misma dinámica: premio-vídeo-anuncios. Tan solo violaron esa rutina con los premios al sonido, y con las nominaciones a mejor banda sonora, en la que en lugar de un vídeo pusieron un grupo de bailarines que danzaban al son de fragmentos de las 5 bandas sonoras nominadas. Un momento propicio para irse al baño. El otro momento adecuado para ello, pero para ir a vomitar, fue cuando subieron al escenario los de "Crepúsculo", presentando un absurdo vídeo sin sentido sobre el cine de terror, en una descarada artimaña para aumentar las audiencias.

El peor momento llegó casi al final, a eso de las 5 de la mañana, cuando quedaban cuatro premios y todos respirábamos aliviados porque iba a acabar pronto... pero entonces llegó el turno de los intérpretes principales y en un ejercicio de autocomplaciencia y lameculismo, cinco actores salieron al escenario a hablar maravillas de los cinco candidatos, extendiéndose por lo menos durante veinte minutos. Tras esto, como si no nos hubiéramos enterado de los nominados (seguro que lo hicieron por si alguien se durmió mientras), una despampanante y espectacular Kate Winslet, subió a la palestra y anunció los nominados, otra vez. El premio se lo llevó Jeff Bridges, ante un público entregado. La misma operación de lameculismo se llevó a cabo con las actrices, aunque en este caso fue Sean Penn, que parecía estar celebrándolo antes que los demás, porque muy sobrio no parecía. Sandra Bullock fue la ganadora, el público en pie y todo el tiempo del mundo para agradecimientos.

La parafernalia acabó a eso de las seis menos diez, y aún quedaba el premio al director y a la película. Como vinieran anuncios y más chorradas de esas entremedias, terminábamos a las 10 de la mañana. Pero entonces todo se aceleró estrepitósamente, y en poco más de diez minutos, se anunciaron los candidatos a la dirección, se dieron los premios, Bigelow dio su discurso y como una flecha, Tom Hanks entró en la sala (creo que ni había salido del escenario la ex de Cameron) y dijo que el ganador de la película era "The hurt locker", sin anunciar nominados ni nada, con un par. Agradecimientos, Steve Martin y Alec Baldwin despidiendo y ya está, a las seis en punto. Vamos, un caos y un despropósito completo de gala. Pero merece la pena haber aguantado para ver cómo la mejor película del mundo mundial y las generaciones venideras, pues nadie la podrá igualar (estoy hablando de "Avatar"), mordía el polvo. ¿Oscar merecido? Bueno, "En tierra hostil" no es que sea una mala película, pero con tal de no ver ganar a la peli de Cameron, acepto lo que sea.

A continuación, la lista de nominados, con los ganadores en negrita

PREMIOS OSCAR 2010 Ganadores

Mejor película
Avatar
Up in the air
Up
Malditos bastardos
Una educación
District 9
Un tipo serio
The blind side
Precious
En tierra hostil

Mejor película de animación
Up (Disney Pixar)
Tiana y el sapo (WEalt Disney Animation)
Los mundos de Coraline (Focus Features)
Fantastic Mr. Fox (20th Century Fox)
The secret of Kells (Les Armateurs/France Cinema)

Mejor película de habla extranjera
La cinta blanca (Alemania)
El secreto de tus ojos (Argentina)
La teta asustada (Perú)
Un profeta (Francia)
Ajami (Israel)

Mejor documental
Burma VJ
The cove
Food, Inc.
The most dangeous man in America: Daniel Ellsberg and the Pentagon Papers
Which way home

Mejor director
James Cameron (Avatar)
Kathryn Bigelow (En tierra hostil)
Jason Rateman (Up in the air)
Quentin Tarantino (Malditos bastardos)
Lee Daniels (Precious)

Mejor guión
En tierra hostil
Malditos bastardos
Up
El mensajero
Un tipo serio

Mejor guión adaptado
In the loop
District 9
Una educación
Precious
Up in the air

Mejor actor principal
Jeff Bridges (Corazón salvaje)
Morgan Freeman (Invictus)
George Clooney (Up in the air)
Colin Freed (Un hombre soltero)
Jeremy Renner (En tierra hostil)

Mejor actriz principal
Sandra Bullock (The blind side)
Meryl streep (Julie y Julia)
Gabouire Sibide (Precious)
Carey Mullygan (Una educación)
Hellen Mirren (The last station)

Mejor actor secundario
Mat Damon (Invictus)
Woody Harrelson (El mensajero)
Christopher Plummer (The last station)
Stanley Tucci (The lovely bones)
Christoph Waltz (Malditos bastardos)

Mejor actriz secundaria
Penélope Cruz (Nine)
Vera Farmiga (Up in the air)
Maggie Gyllenhaal (Corazón salvaje)
Anna Kendrick (Up in the air)
Mo'Nique (Precious)

Mejor montaje
Avatar
En tierra hostil
District 9
Malditos bastardos
Precious

Mejor fotografía
En tierra hostil
Avatar
La cinta blanca
Harry Potter y el misterio del príncipe
Malditos bastardos

Mejor música
Avatar
En tierra hostil
Up
Fantastic Mr. Fox
Sherlock Holmes

Mejor canción
"Almost there" (Tiana y el sapo)
"Down in New Orleans" (Tiana y el sapo)
"Loin the Paname" (Paris 36)
"Take it all" (Nine)
"The weary kind" (Corazón salvaje)

Mejor dirección artística
Avatar
Nine
La reina Victoria
Sherlock Holmes
El imaginario del doctor Parnasus

Mejor maquillaje
Il divo
Star Trek
La reina Victoria

Mejores efectos visuales
Avatar
District 9
Star Trek

Mejor sonido
Avatar
En tierra hostil
Malditos bastardos
Star Trek
Transformers 2: la venganza de los caídos

Mejor montaje de sonido
Avatar
En tierra hostil
Malditos bastardos
Star Trek
Up

Mejor cortometraje de ficción
The door
Instead of Abracadabra
Kavi
Miracle Fish
The new tenants

Mejor cortometraje documental
China's unnatural disaster
The last campaign of gobernor Booth Gardner
The last truck
Music by prudence
Rabbit à la Berlin

Mejor cortometraje de animación
French roast
Granny O'Grims's sleeping beauty
La dama y la muerte
Logorama
A mater of loaf and death

Para más información pinchar aquí

domingo, 7 de marzo de 2010

2008: El sueño hindú

SLUMDOG MILLIONAIRE

Título original: Slumdog millionaire
Año: 2008
País: EE.UU.
Duración: 115 min.
Fecha de estreno en España: 13 de febrero de 2009
Director: Danny Boyle
Guión: Simon Beaufoy, según la novela "¿Quién quiere ser millonario?" de Vikas Swarup
Música: A. R. Ahrman
Montaje: Chris Dickens
Fotografía: Anthony Dod Mantle
Productor: Christian Colson
Compañía: Pathé/Film 4/Celador Films
Intérpretes: Dev Patel, Freida Pinto, Madhur Mittal, Anil Kapoor, Irrfan Khan, Mia Drake et al.

Ganadora de 8 Oscar: película, director, guión adaptado, montaje, fotografía, música, canción, sonido

Jamal es un chico criado en las barriadas de Bombai que está concursando en la edición hindú de ¿Quién quiere ser millonario? Contra todo pronóstico le está yendo muy bien, demasiado bien para un chaval analfabeto. Por eso, el día antes de estar a punto de contestar la última pregunta del concurso, es detenido, pues creen que está haciendo trampas. En la comisaría, Jamal contará al jefe de policía la historia de su vida, pues encierra las claves de por qué un chico sin cultura conoce la respuestas del concurso.

Y llegamos a la última película de este reto, la ganadora del Oscar a la mejor película en la edición del 2009. Al ser un filme tan reciente, ya hay una crítica en este blog, pero las reglas son las reglas, por lo que me la he vuelto a ver y ahora estoy aquí, escribiendo su crítica. Creía que con el paso del tiempo cambiaría mi opinión sobre la película, y en cierto modo lo ha hecho: ha pasado de ser una mierda absoluta a simplemente una película decente que acaba por ser destrozada.

"Slumdog Millionaire", que es la película en cuestión, fue la flamante triunfadora de los Oscar del año pasado, consiguiendo el mismo número de estatuillas que "La ley del silencio", "De aquí a la eternidad" o "Amadeus", lo que se define como un insulto al cine y al buen gusto. Pero es que esta película sobre unos pobrecitos niños hindúes conmovió al público e incomprensiblemente a la crítica, rompiendo la racha de no más de 4 premios de los anteriores filmes, iniciado por los 11 oscars de "El retorno del rey". Con ello se supone que querían premiar el típico sueño americano, pero vivido por unos niños indios, en una película que empieza muy muy bien, pero acaba muy muy muy mal.

La película está contada a base de flashbacks y saltos temporales, que cuentan tres bloques: el pasado lejano, cuando Jamal era un crío; el pasado inmediato, el concurso de televisión y el presente, cuando Jamal declara en la comisaría. El filme va saltando de una historia a otra muy agilmente, engarzando las partes de forma precisa y fluida, amenizando la narración. La fotografía es otro punto fuerte del filme, llena de claroscuros pero también luminosa y muy bella en general. Pero tiene un colorido demasiado extraño, que junto a la fenomenal música y ambientación, dotan al filme de un tono erótico festivo un tanto extraño. Las interpretaciones tampoco es que sean gran cosa. Los niños no lo hacen demasiado mal (ni demasiado bien) pero son una ricura y, al fin y al cabo, son niños, no vamos a exigirles el Jake LaMotta de De Niro. El único que destaca en este aspecto, siendo lo mejor de la película, es el actor que hace de presentador. Genio y figura.

Del guión decir que no está mal. Parte de una idea muy original, pero el desarrollo de los acontecimientos es poco creíble. No me refiero a los sucesos que marcan la vida de Jamal, perfectamente verosímiles, sino a los sucesos que le hacen conocer las respuestas, como que un niño ciego, analfabeto como él sepa perfectamente cómo es Benjamin Franklin, cuando incluso yo tengo dificultades para reconocerlo. O que conozca que Colt fue el creador del revolver sólo porque su hermano le apunte con un arma de ese tipo y pronuncie su modelo. Si al menos hubiera jugado al Trivial, donde hay una pregunta al respecto, sería comprensible, pero ni esas. Sin embargo, le damos un voto de confianza a Boyle y nos creemos lo que le cuenta, pues la vida puede estar llena de casualidades que, aunque sean difíciles de creer, son verosímiles.

Pero todo empeora cuando Jamal se hace mayor y alcanza la edad del presente. Es en esa parte en la que el film alcanza unas cotas de ridiculez realmente vergonzosas. A partir de aquí, Jamal conoce el amor (¡oh, que bonito!), iniciándose así un romance que estropea la película, no porque sea ñoño, sino porque es totalmente efectista e insulso. En este momento, a Boyle no le interesan los acontecimientos, sino que el amor triunfe sobre todas las cosas, dejando de un lado la verosimilitud en pos del romance. Así tenemos algunas escenas que rozan el mal gusto, como Latika corriendo hacia su enamorado con la música del programa de fondo (¿dónde ha aprendido cine Danny Boyle, Dios mío?), o el baile que se marcan al final.

Pero la gota que colma al vaso es la pregunta del final. A lo largo de casi dos horas Jamal ha demostrado a todo el país que conoce cosas como que Colt inventó el revolver, que no se quién hizo no se qué canción y que no se cual jugador hizo no se cuantas carreras jugando al cricket, pero no se les ocurre otra cosa a los del programa que preguntarle una cosa que lo sabría hasta un niño de primaria. Es como si a un estudiante de matemáticas le preguntas en el ultimo examen para sacarse la carrera, cuánto es 2 + 2. Vale, Jamal es un analfabeto y en teoría será lógico que no supiera una pregunta de literatura, por cierto, bastante predecible. Pero si ha demostrado saber cosas casi imposibles, ¿por qué se le hace esa pregunta? ¿acaso los del programa querían regalarle el dinero? En fin, que eso, aunque hagamos un esfuerzo sobrehumano para creérnoslo, no podemos hacerlo, con lo que ese voto de confianza que le dimos al director y al guionista desaparece y todo lo anterior se convierte en basura. Dejamos de creernos lo de Franklin, lo de Colt, lo del cantante, e incluso la primera pregunta, y nos damos cuenta de que todo ha sido una mera patraña, completamente absurda, hilvanada forzosamente para conducirnos a la conclusión de la historia, lo único que importaba en toda la película: el romance entre Jamal y Latika.

Así que, después de un montaje muy bueno, una fotografía muy currada y una ambientación muy bien hecha, que conforman un film que apuntaba maneras, toda la parte del final lo destroza sin compasión, convirtiéndola en una película insulsa, hecha para el público menos exigente, que busca historias bonitas sin importarle la credibilidad de lo que se cuenta. Mucha gente se defendía diciendo que la película es muy bonita y que les ha gustado mucho, pero que te guste una película no quiere decir obligatoriamente que sea buena (a mí me encantó "Moulin Rouge" y es una bazofia). Por eso, existiendo películas tan geniales como "El curioso caso de Benjamin Button", incomprendida por ser muy deprimente y muy larga (absurda manía esta) o películas tan serias como "El desafío: Frost contra Nixon", lo más decente que ha hecho Ron Howard, o "El lector", no se comprende cómo pudo ganar. Si tenemos en cuenta que ese año se estrenaron dos de las mejores películas de todos los tiempos, léase "El caballero oscuro" y "Wall-E", pero que no fueron nominadas a mejor película, se puede deducir el pésimo criterio de los Académicos en esta última edición de los premios Oscar, criterio que parece va a continuar en la siguiente edición, que se realiza esta noche, donde el mito de "Pocahontas" y "Bailando con lobos", pero en ciencia ficción y con muñequitos azules, va a arrasar con todo. C'est la vie.

sábado, 6 de marzo de 2010

2007: Toma el dinero y corre

NO ES PAÍS PARA VIEJOS

Título original: No country for old men
Año: 2007
País: EE.UU.
Duración: 117 min.
Fecha de estreno en España: 8 de febrero de 2008
Director: Ethan y Joel Coen
Guión: Ethan y Joel Coen, según la novela homónima de Cormac McCarthy
Música: Carter Burwell
Montaje: Roderick Jaynes
Fotografía: Roger Deakins
Productores: Ethan Coen, Joel Coen y Scott Rudin
Compañía: Paramount Vantage/Miramax Films
Intérpretes: Tommy Lee Jones, Javier Bardem, Josh Brolin, Kelly Macdonald, Woody Harrelson, Stephen Root, Garret Dillahunt et al.

Ganadora de 4 Oscar: película, director, guión adaptado, actor secundario

Llewelyn Moss es un cazador de Texas que se encuentra en mitad del desierto, los restos de una brutal matanza entre narcotraficantes. Cadáveres por el suelo, casquillos de bala, drogas... y el trastro del único superviviente del grupo. Llewelyn lo sigue, hasta topar con el cadaver de un hombre que tiene en posesión un maletín lleno de dinero, el cual se lleva sin pensárselo dos veces. Peor cuando todo parecía solucionado, Llewelyn empieza a ser perseguido por Antón Chigurh, un despiadado asesino contratado para conseguir el dinero.

Lo bueno que tiene el cine en casa es que te permite ver una película las veces que quieras. Eso es muy importante, pues no siempre el primer visionado de una película es satisfactorio y puedes descubrir nuevas cosas posteriormente. Así, una película que te pareció mala en su momento te puede parecer buena viéndola por segunda vez, o viceversa. Con el caso de "No es país para viejos" he legado a las mismas conclusiones que la primera vez: es una película bastante buena. Sin embargo, introduciéndola en el contexto del reto, comparándola con el resto de filmes que han ganado el Oscar, no es más que un thriller del montón, salvo por una excepción que todos conocemos.

Siguiendo la manía de la Academia de zanjar cuentas pendientes, iniciada con Clint Eastwood y continuada con Martin Scorsese, esta vez le tocaba el turno a los hermanos Coen, genios del cine actual, autores de esa maravilla titulada "Muerte entre las flores". Como suele ser normal en estos casos, la película premiada no suele ser la mejor del realizador en cuestión, sino un filme un tanto impersonal y más asequible al público medio. Y esto se ve en "No es país para viejos". Le falta la frescura de "Fargo" y también sus personajes estrambóticos que podíamos contar a pares, ya sean en dramas o en comedias. Aquí sólo tenemos al personaje de Cigurh, interpretado de forma sensacional por Javier Bardem. Él es lo mejor de la película, la única razón por la que merece la pena esta película.

Y es que "No es país para viejos" es un thriller del montón. Ni hace vibrar la sangre como en "French Connection" ni te mantiene en el sillón como "Infiltrados". Es un filme lento, muy lento, con grandes silencios y pausas que pueden llegar a cansar. Sin embargo, la primera hora de película se pasa volando. Es la segunda hora la que se hace más pesada, y eso que es la que más acción tiene, en unas secuencias genialmente rodadas y muy intensas, pero que paradójicamente mantienen ese tono pausado y sereno. Eso sí, a medida que se acerca el final, los Coen vuelven al experimentalismo, con un desenlace que recuerda al de "El silencio de los corderos" y con una escena final de esas que te quedas pensando "WTF?" toda la tarde.

Hay otros aspectos, como las interpretaciones del resto del reparto, la fotografía, el montaje o la música, que tampoco destacan demasiado, con lo que al final tenemos un thriller muy bien hecho pero que no es gran cosa. Mejores películas han hecho los Coen y mejores filmes han ganado el Oscar. "No es país para viejos" comienza siendo un thriller asequible, con una grandísima interpretación de Bardem y acaba de una forma un tanto extraña, que deja una sensación rara al espectador. Esta película no sólo hizo que los hermanos Coen ganaran el Oscar, sino que se convirtieran en los hermanos "Coin", pues desde entonces alcanzaron gran popularidad, lo que les ha permitido dirigir casi una película al año. Porque da igual lo que hagan, son unos directores de culto y por ende, tienen que molar. Ay, ¿qué se hicieron de esos directores capaces de crear una obra como "Miller's crossing"?

viernes, 5 de marzo de 2010

Quiniela y preferidos para los Oscar

Vamos a hacer algo interactivo:

Quiénes creéis que ganarán y quiénes desearíais que ganaran (y a quiénes echáis de menos)

Yo:

Ganarán: The Hurt Locker (mejor peli)
Reitman (director)
Jeff Bridges (actor ppal)
Sandra Bullock (actriz ppal)
Woody Harrelson (actor reparto)
Vera Farmiga (actriz reparto)
Inglorious Basterds (Guión Original)
La Cinta Blanca (extranjera)
Avatar en todo lo demás.

Deseos: Inglorious Basterds (Mejor peli)
Reitman (director)
Clooney (actor ppal)
Cualquiera menos Sandra Bullock, pues la odio (actriz ppal)
No puedo decir un actor de reparto porque la mayoría de las pelis
Vera Farmiga (actriz reparto)
Inglorious Basterds (Guión Original)
El secreto de sus ojos (extranjera)

Echo de menos: "500 days of summer" no ha sido nominada para nada y echo de más "Invictus" que me pareció un bodrio.

2006: Justicia divina

INFILTRADOS

Título original: The departed
Año: 2006
País: EE.UU.
Duración: 145 min.
Fecha de estreno en España: 27 de octubre de 2006
Director: Martin Scorsese
Guión: William Monahan, a partir del guión de Siu Fay Mak y Félix Chong para "Infernal Affairs"
Música: Howard Shore
Montaje: Thelma Schoonmaker
Fotografía: Michael Ballhaus
Productores: Brad Pitt, Brad Grey, Gianni Nunnari y Graham King
Compañía: Warner Bros./Initial Entetainment Group/Vertigo Entertainment
Intérpretes: Leonardo DiCaprio, Matt Damon, Jack Nicholson, Mark Wahlberg, Alec Baldwin, Martin Sheen, Ray Winstone, Vera Farmiga, Todd Peterson et al.

Ganadora de 4 Oscar: película, director, guión adaptado, montaje

Con el objetivo de cazar a Frank Costello, el mafioso más peligroso de Boston, el cuerpo de policía decide infiltrar en su banda a Billy Costigan, un recién salido de la academia de policía con numerosos miembros de su familia relacionados con el crimen, lo que le sitúa como el candidato ideal. Lo que la policía no sabe es que otro recién llegado, Collin Sullivan, uno de los mandamases del operativo, es un topo de Costello, infiltrado en el cuerpo para informar al capo de todos los avances en la operación.

Vivimos en pleno Siglo XXI y la gente se ha vuelto más tolerante en algunos aspectos. La homosexualidad es algo normal, el racismo no es tan arraigado como antes y hay mucho más aperturismo. Pero aun así, hay gente con la mente cerrada que no quiere comprender ciertas cosas, como por ejemplo, que un remake no puede ser una buena película, porque es una copa y no hay creación en ellas. Los que piensan eso es que nunca han visto "Infiltrados", la película que hizo justicia al mayor genio cinematográfico que ha pisado la faz de la Tierra: Martin Scorsese.

Bueno, justicia en parte, pues no se puede considerar justo que la Academia ha preferido premiar a filmes como "Rocky", "Gente corriente" o "Bailando con lobos" en lugar de "Taxi Driver", "Toro salvaje" y "Uno de los nuestros", tres de las mejores películas de todos los tiempos. Por eso, temiendo un segundo caso Kubrick, los académicos de Hollywood decidieron, al fin, reconocer el trabajo de Scorsese. Y digo reconocer su trabajo porque tal y como se produjo la entrega del premio al mejor director parecía más un Oscar honorífico a toda su carrera: Spielberg, Coppola y Lucas, tres de las grandes figuras que salvaron el cine durante los 70, subieron al escenario a entregarle el premio ante un público enfervorecido, que se puso en pie durante el trayecto del cineasta (¿o debo decir Dios?) desde la butaca al escenario.

Pero esto no quiere decir que "Infiltrados" no mereciera el Oscar a la mejor película. Si quisieran haberle hecho un homenaje al director de Queens, habrían podido premiarle perfectamente por "Gangs of New York" o "El aviador". Sin embargo, esperaron a que hiciera una película medianamente buena para hacerlo, pues "Infiltrados", sin ser uno de los mejores trabajos del director, es un auténtico peliculón, pues un trabajo decente de Scorsese es mucho mejor que la infinidad de filmes que se estrenan en las salas. Y es que "Infiltrados" es un filme que se disfruta desde el primer momento hasta el último, momento en el que, a pesar de haber pasado dos horas y media, quieres más, mucho más. Es tal la fuerza y la maestría narrativa que desprende Scorsese en "Infiltrados" que vemos la película ensimismados, cautivados por los acontecimientos y por la técnica del genio neuyorkino.

Y es la técnica lo que predomina en "Infiltrados", al igual que en todas las cintas de Scorsese. No me voy a poner a decir ahora las diabluras que el director realiza con la cámara o las claves de su cine, eso lo hicieron mejor los de TCM, pero sí remarcar el prefecto montaje del filme, fruto de Thelma Schoonmaker, que no sólo dota a la película de un ritmo endiablado y una narración perfecta, sino que se recrea en él, creando efectos sugerentes con connotaciones estéticas y narrativos al mismo tiempo (las escenas en las que toda la pantalla está negra y un círculo, donde está el protagonista, se abre o se cierra, revelando la pantalla).

Otro de los puntos fuertes de "Infiltrados" es su reparto. Dicaprio, que ha pasado de niñato guaperas en "Titanic" a actor de renombre gracias a Scorsese, está genial en el que puede ser su mejor papel hasta la fecha (aunque a juzgar por la prensa, todos sus papeles lo son). Matt Damon también está formidable y Mark Walhberg, quién lo iba a decir, realiza la mejor interpretación de la película, que le valió una nominación al mejor actor secundario. Junto a ellos están tres veteranos del cine. En primer lugar Jack Nicholson, que entró en el proyecto debido a que De Niro no estaba disponible, y que realiza un trabajo solvente pero que no es de los mejores de su carrera. Martin Sheen está muy simpático y Alec Baldwin, en una actuación sensacional, todavía vive de este segundo renacer gracias a esta película. Tampoco puedo olvidarme de la fémina de la película, la bellísima Vera Farmiga, que realiza un muy buen trabajo. Vamos, que todos los actores cumplen muy bien, lo que demuestra que Scorsese no sólo es un director técnico, sino que su dirección de actores es formidable.

Por esto, a pesar de no ser de lo mejor del director italoamericano y aunque es un filme menos personal que el resto de sus trabajos, "Infiltrados" es una auténtica gozada, una película enorme en todos sus aspectos, cuasi perfecta, pero que no llega al orgasmo visual que alcanza, por ejemplo, "Uno de los nuestros", para el que esto escribe, la mejor película de gangsters jamás realizada (con mis respetos a "El padrino"). Así que aquellos que pusieron el grito en el cielo porque un remake ganó el Oscar a la mejor película, acusándola de que no es un trabajo original, es que no saben de cine. ¿Un film de Scorsese poco original? En qué mundo vivimos...

jueves, 4 de marzo de 2010

2005: Como la vida misma

CRASH

Título original: Crash
Año: 2004
País: EE.UU.
Duración: 107 min.
Fecha de estreno en España: 13 de enero de 2006
Director: Paul Haggis
Guión: Paul Haggis y Bobby Moresco
Música: Mark Isham
Montaje: Hughes Winborne
Fotografía: James M. Muro
Productores: Paul Haggis, Bobby Moresco, Don Cheadle, Bob Yari y Cathy Schulman
Compañía: Lionsgate Films/Bob Yari Prod./Bulls Eye Ent./DEJ Prod./Blackfriars Bridge Films
Intérpretes: Sandra Bullock, Don Cheadle, Matt Dillon, Jennifer Esposito, William Fichtner, Ludacris, Brendan Fraser, Terrence Howard, Ryan Phillippe et al.

Ganadora de 3 Oscar: película, guión, montaje

Dos jóvenes delincuentes negros que se sienten oprimidos por los blancos. Un senador que depende del boto negro para ganar. Su mujer, que sufre un ataque de xenofobia debido a un desafortunado incidente. Un director de televisión mulato, que oculta su condición en su trabajo por miedo a represalias. Su esposa, acosada por un policía sin que su marido hiciera nada. Un policía racista y mal educado. Su compañero joven e idealista. Un cerrajero de raza hispana. Un tendero iraní. Un detective negro con un hermano conflictivo. Las historias de estos personajes se entremezclan durante fiestas navideñas en la populosa ciudad de Los Ángeles.

En la edición de este año de los Oscar hubo dos películas consideradas claramente favoritas. Una era "Brokeback Mountain", la hermosa y polémica película de Ang Lee, y la otra era "Munich", el escalofriante relato de los trágicos atentados de los JJ.OO. de Munich '72 y sus posteriores consecuencias. Al final de la gala, un gran Jack Nicholson subió al escenario para decir el nombre de la ganadora del Oscar a la mejor película. Abrió el sobre, leyó el nombre, y todos vimos una expresión de asombro en su rostro. Algo raro pasaba. ¿Al fin Hollywood había premiado un filme sobre homosexuales? ¿O quizá suponía el reconocimiento a otra película de Spielberg? Tras ese momento que parecía eterno, Nicholson pronunció el nombre de la ganadora, un nombre de tan solo cinco letras, que dejó a todos con una expresión de asombro: "Crash", la segunda película del guionista de "Million dollar baby", era la ganadora. Muchos pusieron el grito en el cielo, sobre todo los partidarios de "Brokeback Mountain", llegando a decir que era una película racista o que eran muchos telefilmes pegados malamente para formar una película. Lo cierto es, y lo dice uno que pensó lo mismo antes de verla, que "Crash" era realmente la mejor película del año y muy probablemente, una de las mejores de toda la década.

Seguro que muchos se están llevando las manos a la cabeza por lo que digo, y posiblemente tengan razón. Yo no aposté un duro por esta película y cuando ganó me quedé igualmente alucinado. Pero cuando la vi y contemplé como la gente gritaba desesperadamente (y lo digo de forma literal) en ciertas escenas de la película, y cómo lanzaban exclamaciones en las escenas de máximo dramatismo, cambié de opinión. No sé si eso hace buena a na película, pero algo así no he vuelto a vivirla en un cine, sin que proyecten una película de terror.

El principal pilar de "Crash" es su guión. Lleno de situaciones tan verídicas, que parecen sacadas de la vida cotidiana de cada uno. Quizá sea esa la clave del filme, que nos muestra el día a día tal y como es, como si mirásemos todos los días por la ventana. A parte, posee unos diálogos muy logrados y, sobre todo, unos personajes magníficos, que poseen una cualidad que es muy difícil encontrar en el cine actual: son tremendamente complejos. No son blancos o negros, si no que tienen matices. Cuando acaba de ver la película uno no puede saber si el personaje de John es realmente un hijo de puta o está mosqueado por su problema personal, si es un estúpido o un profesional. Tampoco se puede dejar de lado la doble moral de, por ejemplo, el senador, o de uno de los protagonistas negros, ni mucho menos del joven personaje de Ryan Phillipe. Paul Haggis, a pesar de crear unos personajes que en cierto modo son estereotipos, los dota de una complejidad tal que parecen de carne y hueso, aumentando así el realismo del filme.

Otro de los puntos fuertes de "Crash" es su brutal montaje, que te deja sin respiración en todo momento y te entran ganas de lanzarte por la ventana en dos peculiares escenas, debido a su intensidad y su crudeza. Me refiero a las famosas escenas de la niña y del accidente, dos motivos más que suficientes para que "Crash" ganara todos los Oscar habidos y por haber. Una lección magistral de montaje cinematográfico.

Y por último, el tercer factor que llama mucho la atención en esta película son los actores. Es curioso comprobar como Sandra Bullock, Brendan Frasier, Matt Dillon e incluso Don Cheadle, actores típicos de la más absurda comedia Hollywoodiense, trabajen en una película tan dramática como "Crash", y todo ellos lo hagan muy bien. Matt Dillon, el mejor actor de todos y el personaje más complejo de todo el filme (que ya es decir), está magnífico en su papel de policía racista (o no) e hijo de puta (o no). Quizá fuera el gran plantel de actores el que hizo que ganara el Oscar (la influencia de los intérpretes en la Academia es importante), pero se ponga la excusa que se ponga, "Crash" fue digna ganadora.

Y es que "Crash" es durísima, cruda y descarnada. Un filme que narra la verdad sin tapujos, un filme que desvela ese ambiente racista que domina el mundo actual y que tanto ha marcado el inicio de este Siglo XXI. No es de extrañar que al inicio haya una alusión al 11-S. Verídica como la vida misma, el realismo de "Crash" se manifiesta no sólo en los personajes, en el guión o en la puesta en escena, sino en el final, un final (o finales9 que no desvelaré, pero que al igual que en el mundo real, hay problemas que se solucionan bien, otros que se solucionan mal, y otros que, simplemente, no se solucionan. No hay final feliz, ni triste, directamente no hay final, o mejor dicho, los hay de todos los tipos. Obra maestra incomprendida.

miércoles, 3 de marzo de 2010

2004: Mucho más que un millón de dólares

MILLION DOLLAR BABY

Título original: Million dollar baby
Año: 2004
País: EE.UU.
Duración: 127 min.
Fecha de estreno en España: 4 de febrero de 2005
Director: Clint Eastwood
Guión: Paul Haggis, según un relato de F. X. Toole
Música: Clint Eastwood
Montaje: Joel Cox
Fotografía: Tom Stern
Productores: Clint Eastwood y Bobby Moresco
Compañía: Warner Bros./Malpaso Productions
Intérpretes: Clint Eastwood, Hilary Swank, Morgan Freeman, Anthony Mackie, Jay Baruchel, Mike Colter et al.

Ganadora de 4 Oscar: película, director, actriz, actor secundario

Frankie Dunn es un viejo boxeador que regenta un gimnasio junto con su amigo Scrapp. Un día llega a su gimnasio Maggie Fitzgerald, una chica cuyo mayor deseo en la vida es ser boxeadora profesional, con lo que le pide a Frankie que la entrene. A pesar de que este no admite a una mujer como alumna, al final Frankie acepta entrenarla, haciendo que llegue a competir por el título de los pesos walter.

Los Oscar muchas veces han vivido de las deudas. Muchos premios han sido otorgados porque tal o cual no ganó en la anterior edición o, simplemente, no ganó nunca. La mayor parte de las veces estos premios no coinciden con la mejor película del año, pero en otros sí lo hacen. Este es el caso de "Million dollar baby", otra obra maestra de Clint Eastwood que, a pesar de ser claramente el mejor filme del año, se puede entender como una especie de deuda por el fracaso de "Mystic River" el año anterior.

"Million dollar baby" no es un filme que posea muchos alardes técnicos. No tiene grandes efectos especiales, ni una puesta en escena espectacular. Es un filme pequeño, sin pretensiones, austero, acorde con el estilo de Eastwood, con una forma de dirigir semejante a la de los grandes clásicos como John Ford o Sergio Leone. A Clint no le hace falta ese tipo de adornos, pues lo que quiere es contar la historia de unos perdedores, de tres personajes que ven en el boxeo, el típico deporte barriobajero, como su única forma de escape. Y lo hace de forma directa, mostrando los hechos con toda la crudeza posible, sin caer en la extremada violencia, pero sí haciéndola una película bastante desagradable en algunos sentidos.

Esa austeridad que se respira en "Million dollar baby" se debe en gran medida a la tenebrosa y maravillosa fotografía, que ayuda a inferir ese tono claustrofóbico y de sufrimiento de los personajes. Y son los personajes lo más importante en esta película, pues de eso trata el filme, de la vida de unos parias, de la única forma que tienen de encontrar el éxito. Aunque, a decir verdad, la película trata otro tema distinto, mucho más complejo y dramático. Algunos creen que es el típico giro para aumentar el dramatismo de la película, y puede que tengan razón. Pero la otra opción es que este sea el auténtico tema de la película y que todo lo anterior sea un macguffin gigante. Es esta parte lo que hace interesante la película, pues los que vayan a verla sin saber nada, creerán que es una cinta sobre boxeo, al puro estilo "Rocky", pero se encontrarán con una peli sobre el amor, el sacrificio, el sufrimiento, la muerte y los logros no cumplidos de unos personajes que están al final de una vida.

Otros dos factores importantes del filme son el genial guión de Paul Haggis, que saca petroleo de un relato corto de un ex manager de boxeo, y sobre todo, el reparto. He de decir honestamente que el papel de Morgan Freeman, a pesar de hacerlo muy bien, no creo que sea gran cosa como para ganar el Oscar. Eso sí, la gran Hillary Swank, una actriz de gran talento y gran belleza, aunque algunos no sepan apreciarla, está impresionante en su papel de Maggie Fitzgerald. Lástima que hasta la fecha no haya vuelto a hacer un papel semejante. Clint Eastwood está también muy bien, pues realiza algo que nadie podía esperar de él: actuar.

Así que en conjunto, "Million dolar baby" es una obra de arte, un relato durísimo e intenso, con unas secuencias de combates muy bien rodadas y en ocasiones bastante desagradable de ver por su crudeza. Es de esas películas que te mantienen inmovil en el asiento aun al terminar la película, esa sensación que te dejan sólo las obras maestras y que es tan difícil encontrar en una película hoy en día. Después de este filme, Eastwood ha seguido trabajando, pero no ha logrado igualar el listón dejado por "Million dolar baby". La única que más se le aproxima es "Cartas desde Iwo Jima", la incomprendida película del director de San Francisco, quizá porque está hablada en japonés con subtítulos y claro, eso a la gente no le va demasiado. Lástima, con lo bonito que es el japonés hablado.

martes, 2 de marzo de 2010

2003: Un film para asombrarlos a todos

EL SEÑOR DE LOS ANILLOS: EL RETORNO DEL REY

Título original: The Lord of the Rings: the return of the king
Año: 2003
País: Nueva Zelanda
Duración: 192 min.
Fecha de estreno en España: 17 de diciembre de 2003
Director: Peter Jackson
Guión: Peter Jackson, Fran Walsh y Philipa Boyens, según la novela homónima de J.R.R. Tolkien
Música: Howard Shore
Montaje: John Gilbert
Fotografía: Andrew Lesnie
Productores: Peter Jackson, Fran Walsh y Barrie Osborne
Compañía: Newline Cinema/Wingnut Films
Intérpretes: Elijah Wood, Ian McKellen, Viggo Mortensen, Sean Astin, Liv Tyler, Billy Boyd, Dominic Monaghan, Orlando Bloom, John Rhys-Davies, Ian Holm, Christopher Lee, Cate Blanchett, Bernard Hill, Miranda Otto, Hugo Weaving, Andy Serkis et al.

Ganadora de 11 Oscar: película, director, guión adaptado, montaje, música, canción, efectos visuales, montaje de sonido, dirección artística, vestuario, maquillaje

Tras la derrota en el Abismo de Helm, los ejércitos de Sauron deciden realizar una última y brutal ofensiva atacando Minas Tirith, capital del reino de Gondor. Muy dañados, a pesar de la importante victoria, las fuerzas del bien deberán defender la capital cueste lo que cueste, aunque sus rivales les superen infinitamente en número. Por eso, en un intento desesperado para alcanzar posibilidades de victoria, Aragorn, Legolas y Gimly deberán adentrarse en las montañas para convencer a los espíritus de los muertos para que luchen con ellos en la batalla, a pesar de que nadie, jamás, ha regresado del lugar con vida. Mientras tanto, Frodo y Sam, guiados por Gollum, inician la recta final de su viaje hacia el Monte del Destino, en cuyas lavas deberán destruir el Anillo Único y así acabar con el mal en la Tierra Media.

Desde que en 1954 se publicara "El señor de los anillos" el mundo del cine se planteó una y otra vez la idea de trasladar su fabulosa historia a la gran pantalla. Sin embargo, era tal la dificultad de plasmar el libro en imágenes y era tan grande la cantidad de admiradores del libro que sus posibilidades de éxito eran prácticamente nulas. Pasaron los años y tras el intento fallido de Ralph Bakshi, en el 78, de convertirla en un filme de dibujos animados, nadie volvió a hablar de ello. Pero fue a finales del siglo pasado, cuando viendo la capacidad de los efectos visuales contemporáneos, la modesta compañía Newline Cinema decidió embarcarse en tan osada aventura. Poco a poco, la cosa fue cogiendo sentido y se convirtió en uno de los mayores retos de toda la historia del cine. Mucha gente esperaba con anhelo su estreno, para ver sus sueños hechos realidad, mientras que otros no querían que se estrenara nunca, pues desconfiaban del proyecto. Pero cuando la primera película se estrenó, en diciembre de 2001, el mundo quedó boquiabierto. La novela irrodable había sido rodada. El cine parecía no tener límites.

Tras tres años en los que nos acostumbramos a que cada Navidad, a parte del turrón y la lotería, llegara un capítulo de la trilogía, se estrenó "El retorno del rey", la última parte de la trilogía del anillo. Todos decían que era la mejor, quizá por aquello de que siempre lo mejor de una película es el final. No voy a ser yo quien lo discuta, pero lo cierto es que, después de haberla visto por enésima vez, y a pesar de ser una de mis películas favoritas, he sacado algunos errores y defectos. Quién me lo iba a decir a mí.

La raíz del problema, según creo, está en Peter Jackson, un tipo que cuando estaba entrado en kilos era más entrañable que ahora, pero igual de mal director. Algunas frases, gestos o forma de actuar de los personajes, que en ocasiones resultan absurdas y poco naturales, han salido de su imaginativa cabezota, genial a la hora de realizar películas de terror gore pero no demasiado buenas cuando uno se enfrenta a un proyecto de esta en-berga-dura (toma chiste de estrangis). Además, el filme está lleno de gazapos bastante graves, como que Frodo y Sam se disfracen de orcos para salir de la guarida donde el primero estaba preso, pero al rato aparezcan con ropas hobbis, a no ser que los orcos vistan con tirantes, claro. O que, en la Puerta Negra, en una escena estén los héroes montados a caballo pero en la siguiente no haya rastro de los animales, y eso que los buenos estaban rodeados sin escapatoria.

Otro error grave, y yo diría el más grave de todos, es el final de la película. Cuando Peter nos planta un fundido a negro en la escena del monte del destino y mantiene la pantalla en ese color durante un tiempo, parece que la película va a terminar. La verdad, quedaría genial, pero faltaban cosas que contar. Así que, en lugar de olvidarse de ese fundido y seguir contando el resto como si de un bloque uniforme se tratara, mantiene ese fundido, de tal forma que todo lo que viene después parece un inserto a parte, como diciendo "chicos, os tengo que contar esto pero rapidito, que hay que cerrar". Igualito que la cafetería de mi facultad a las 5 de la tarde. Pero ahí no acaba la cosa. Como dice la ley de Murphy, si algo tiene que salir mal saldrá mal. Por eso, mientras nos deleitan con la fabulosa escena de la coronación de Aragorn, y la emotiva despedida de los Puertos Grises, con ese barco alejándose en el horizonte, que sería el mejor y más elegante final para una trilogía que jamás nadie podía haber imaginado, llega el amigo Peter y nos planta una escena de Sam con sus hijos y su mujer y una voz en off de Frodo. Sí, es menos de 1 minuto de escena, pero ha destrozado un majestuoso final.

Son estos últimos fallos producidos más por acortar la duración de la cinta que por una pésima realización. Aunque, ahora que lo pienso, si vas a hacer una peli de tres horas ¿por qué ruedas más? ¿Qué pasa con la planificación del rodaje? Teniendo en cuenta que Jackson es uno de los productores de la peli, se le puede echar la culpa de ello.

Pero afortunadamente, la película no la ha echo sólo Peter Jackson, sino que está acompañado de un equipo artístico y técnico impresionante, que son los verdaderos artífices de la película. Es como si tienes a un jugador mierda y le pones al lado de los mejores del mundo: al final el jugador mejora. Es su laborioso trabajo (cuando vi a los tíos que unían manualmente todas las anillas de las cotas de maya, una a una, sem e quedó el culo torcido) el que hace que "El señor de los anillos" sea una cuasi obra maestra. Así, "El retorno del rey" y por extensión toda la trilogía, pueden alardear de una ambientación perfecta, debido a la grandísima fotografía de Andrew Lesnie, al formidable vestuario y peluquería, a los actores, que no podían ser otros, y sobre todo a la música, posiblemente, la mejor banda sonora que jamás se haya compuesto en toda la historia del cine. Todo esto hace que la experiencia de "El señor de los anillos" sea impresionante, recreando el mundo casi a la perfección, tal y como imaginó Tolkien, y con una labor de guión magistral (eso hay que reconocérselo a Jackson), que eliminó la paja para sintetizar en poco más de 9 horas toda la historia de los 3 libros.

Por eso, podemos criticar todo lo que queramos a Peter Jackson, llamarle gordo seboso o lo que queramos, pero no se le puede negar que tuviera algo que nadie tuvo hasta la fecha: los cojones suficientes como para enfrentarse a tamaño proyecto. Y a tenor de los resultados, le ha salido fabulosamente bien, pues aunque tenga algunos fallos que se le puedan recriminar, estos no empañan en absoluto la calidad de la película, pues en conjunto "El retorno del rey" es una auténtica obra de arte. Un filme impresionante, casi perfecto, que si hubiera contado con un director con las mismas agallas y más calidad, habría sido totalmente perfecta, pero que no deja de ser, por ello, una auténtica maravilla de película. Y eso se nota en su influjo: la única película que ha ganado más Oscar haciendo pleno, la legión de películas que la imitaron, tanto en su estética como en su forma de producción (rodando las tres pelis seguidas) o la primera película de fantasía en ganar el Oscar al mejor film. Además de todo esto, "El señor de los anillos" supone el regreso del cine épico clásico de Hollywood, al estilo de "Ben-Hur" (casualmente, comparten número de Oscar) y una muestra de que para el mundo del cine todo es posible, incluso rodar una película que, según casi todos, era imposible de rodar.

lunes, 1 de marzo de 2010

2002: Dios bendiga Illinois

CHICAGO

Título original: Chicago
Año: 2002
País: EE.UU.
Duración: 108 min.
Fecha de estreno en España: 7 de marzo de 2003
Director: Rob Marshall
Guión: Bill Condon, según el musical homónimo de Bob Fosse y Fred Ebb
Música: John Kander y Danny Elfman
Montaje: Martin Walsh
Fotografía: Dion Beebe
Productor: Martin Richards
Compañía: Miramax
Intérpretes: Renée Zellweger, Catherine Zeta-Jones, Richard Gere, Queen Latifah, John C. Reilly, Christine Baranski, Taye Diggs et al.

Ganadora de 6 Oscar: película, actriz secundaria, dirección artística, montaje, vestuario, sonido

Roxie Hart es una joven del Chicago de los años 20 cuyo mayor sueño es ser una cantante de cabaret, como su gran ídolo Velma Kelly. Por esta razón engaña a su marido con Fred Casely, un hombre que dice tener contactos en las altas esferas que podrán colocar a Roxie. Pero tiempo después descubre que todo es falso, que Fred no conoce a nadie del espectáculo y que sólo lo dijo para acostarse con ella. Roxie no se lo toma demasiado bien y mata a su amante, con lo que es encarcelada bajo la amenaza de acabar en la horca. Para salir de su delicada situación, Roxie deberá contratar a Billy Flynn, un famoso abogado experto en crímenes pasionales, que se conoce al dedillo el mundo judicial de la época, lo que le ha permitido que nunca jamás pierda un juicio.


Tras el estreno en 2001 de la abominable "Moulin Rouge" parecía que el musical se había puesto de moda otra vez. Si bien la película de Luhrban no alcanza la suficiente calidad, si es que tiene alguna, para relanzar con seguridad un género ya perdido, es cierto que su enorme éxito demostró que este género no estaba tan dormido como muchos pensaban. Esto mismo pensó Rob Marshall, un joven director que debutó en la gran pantalla con una deslumbrante y divertidísima sátira sobre el espectáculo que originaba el crimen durante los años 20: "Chicago", una auténtica delicia de musical.

Es cierto que ese año estuvieron nominadas muy buenas películas, como la desoladora "El pianista", la genial "Gangs of New York", o la segunda parte de la saga del anillo. Pero ¿qué fue lo que hizo que entre todas estas ganase un musical 34 años después de "Oliver!"? A parte de otros factores que algunas veces no comprendo, fue el enorme éxito y, por qué no, la gran calidad de "Chicago" la que hizo que mereciera el Oscar a la mejor película. Y es que, aunque pueda parecer que es una mala película, o que es una crítica bastante subjetiva debido a mi amor por los musicales (amo más a Scorsese, así que no tiene sentido este argumento), "Chicago" es una auténtica maravilla.

El filme no es como los musicales al uso. No se parece a "Sonrisas y lágrimas", "Cantando bajo la lluvia" o "West side story". Es un musical que sigue la escuela de "Cabaret", donde las canciones se representaban en el escenario, delante de un público, y no en mitad de la calle, dando saltos y brincos sin sentido. Con esto se gana bastante en realismo. Pero Marshall va más allá y da un enfoque narrativo a este estilo de musical. Como si de una voz en off se tratase, los números musicales de "Chicago" son utilizados para expresar los anhelos y pensamientos de los personajes, de tal forma que, si en otras películas del género podíamos prescindir de las canciones, metidas al tuntún, aquí son fundamentales para saber lo que piensa cada personaje en cada momento.

Tampoco las coreografías y los decorados de estos números están realizados al azar, sino que tienen sentido narrativo. Así, en la canción "Roxie", en la que la protagonista canta una canción sobre sí misma, el decorado se llena de espejos que la reflejan a ella, pues es ella lo que realmente importa. En el genial tema "We both reached for the gun", que tenéis arriba, vemos a los periodistas y la propia Roxie como títeres controlados por Billy Flynn, algo que ocurre en la realidad de los personajes.

Otro atractivo que tienen los musicales, a parte de las canciones, que en el caso de "Chicago" son todas fabulosas, es ver a un grupo de intérpretes que dudábamos de sus cualidades vocales verles cantar y bailar estupendamente bien. En este caso, si nos sorprende ver danzar a la despampanante Catherine Zeta Jones teniendo en cuenta sus inicios como cantante y baliarina en el teatro, contemplar atónitos lo bien que se desenvuelve Richard Gere en el escenario te puede hacer entrar en un estado de schock. Sus dos únicos números musicales son, a mi juicio, los mejores temas de toda la película. Renée Zellweger, aun con las mismas carusas que siempre pone, está espléndida, aunque estaría mejor con unos pocos kilos de más. Queen Latifa, no sé por qué, no me sorprende tanto, y John C. Reilly protagoniza un curioso y elegante número musical. Todos ellos están espléndidos y sorprenden gratamente.

Las partes intermedias entre número y número, lo que se puede considerar película en sí, no desentona en absoluto con los números musicales, ensartando estos últimos de forma tan elegante y certera que a penas llama la atención. Merecidísimo Oscar al montaje.

Con todo, aunque pueda parecer un filme menor por tratarse de una comedia musical, "Chicago" tiene muchísimos méritos que la hacen digna ganadora del Oscar de este año: unas canciones estupendas, una escenografía impecable, unos actores en estado de gracia, un guión muy simpático y una fuerza y vitalidad impresionantes, que hicieron, esta vez sí, que el musical volviera a renacer. Después de esta llegaron otros muchos filmes del género, como "Los productores", "Sweeney Todd" o "Mamma Mía", siendo esta última la única que se acerca a la sensación de disfrute de "Chicago", pero sin la elegancia visual de la peli de Marshall. Ni siguiera el propio director, con su último trabajo, ha podido igualar la frescura de su primer film. Y es que "Chicago" se puede considerar un milagro, al triunfar en una época poco proclive para hacerlo. Que Dios bendiga Illinois.