Título original: Alice
Año: 1990
País: EEUU
País: EEUU
Duración: 100 min
Director: Woody Allen
Guión: Woody Allen
Director: Woody Allen
Guión: Woody Allen
Fotografía: Carlo Di Palma
Música: Varios (Woody's Cocktail)
Música: Varios (Woody's Cocktail)
Reparto: Mia Farrow, William Hurt, Alec Baldwin, Caroline Aaron, Blythe Danner, Judy Davis, Joe Mantegna, Bernadette Peters, Cybill Shepherd, Patrick O'Neal, Lisa Marie
Commpañía: Orion/Columbia
Commpañía: Orion/Columbia
Mi puntuación filmaffinity: 8
Puntuación filmaffinity: 6,8
Puntuación filmaffinity: 6,8
Estaba yo empezando a ver esta película cuando he caído en la cuenta de que aún no tenemos ninguna crítica de Woody Allen en Ni media palabra. Con humildad, pues, me animo a romper el hielo con una de sus películas no tan conocidas: Alice.
En cierto sentido Alice es Woody Allen en estado puro. Entre drama y comedia (quizás más bien esto último), tiene toques delirantes, casi absurdos, gags de humor terriblemente brillante y ácido. Todo esto como sin que nos demos cuenta de que la película, en realidad, trata de temas profundos, muy serios. En definitiva, de cómo pasar un buen rato a la vez que podemos reflexionar sobre quiénes somos y qué es lo que hacemos con nuestras vidas.
Woody Allen trata de los asuntos más íntimos, de lo más profundo y sutil de las relaciones humanas, pero de una forma en que las mayores tragedias pierden trascendencia, como queriendo decir "ey, no importa a dónde hayas llegado, la vida sigue: disfruta". De forma algo más explícita este mensaje está presente en muchas de sus películas, como la reciente e hilarante Si la cosa funciona.
Pero cómo hablar de Woody Allen sin mencionar el aspecto sonoro. Como de costumbre, toda la película es un auténtico espectáculo del mejor jazz, combinado sabiamente con chispas de música clásica. No en vano el propio Allen es clarinetista semi-profesional.
Mención especial al Doctor Yang y su clínica.
En definitiva, una delicia. Quizás no sea uno de sus trabajos más sesudos o académicos, ni tampoco una de sus comedias más declaradamente disparatadas, por no mencionar que el genial Allen no actúa en esta ocasión (y, sin embargo, es una de las pocas veces en que no lo he echado en falta... hasta ahora mismo no había caído en ello), pero encuentro el conjunto de lo más convincente, toda una muestra de buen cine. Y es que resulta increíble el número de grandes películas que acumula el director quien, a mi juicio, es de lejos uno de los mejores directores de todos los tiempos. En fin, esta u otra, no pierdan tiempo en explorar la increíble obra de Woody Allen, todo un regalo.